Durante el verano es muy habitual que el número de parejas que terminan su relación incremente drásticamente. Por ello, si has llegado a esta entrada porque tu pareja se ha acabado, ya sea porque has decidido romperla tú o la otra persona, estamos aquí para ayudarte.

Sabemos que estas pasando por un momento muy doloroso. Somos conscientes de que pasar por el duelo de una ruptura es un mal trago que nadie desea pasar en su vida pero, sin embargo, casi toda la población ha pasado por ello al menos en una ocasión.

El duelo emocional es el proceso psicológico de aceptación y adaptación al que nos enfrentamos cuando hay una pérdida. Esto supone una situación estresante para el individuo que se verá obligado a restablecer el equilibrio personal de las emociones. 

Porque terminar una relación duele, y eso es algo que debes aceptar para poder comenzar a superarlo.

Aprender a distinguir quién merece una explicación, quién merece solo una respuesta, y quién merece absolutamente nada. Alexandra Remón.

Conocer las fases por las que vas a pasar, antes o después, en el proceso de superación del duelo, te ayudara a entender los sentimientos y emociones que te abordaran.

1. Negación. «No puede estar pasándome esto a mi´´ o «¿Ahora que voy a hacer sin ti?´´. La primera fase es el comienzo de todo y normalmente se da cuando la relación se rompe. Hay muchas personas que la pasan aún estando con su pareja y otras inminentemente cuando las dejan. Es algo que, para tu cabeza, es imposible que este sucediendo. Niegas que el amor haya acabado y te invade la tristeza (y posiblemente el llanto).
2. Ira. «¿Cómo ha podido esto a mí? El odio y la desesperación hacen acto de presencia. Lo que antes era llanto, ahora es enfado. Hay personas que se aferran a este sentimiento para pasar página cuanto antes, pero si te excedes agarrándote al odio, al final acabarás creando rencores. Por ello, debes sanar para poder continuar con tu vida en paz.
3. Negociación. Cuando el enfado se va, hay muchas personas que tienden a buscar soluciones irreales, a actuar por impulsos y a intentar contactar con su ex pareja para poder volver al pasado o revivir algún momento extra. Sabemos que echas de menos a tu expareja por el apego emocional y la rutina que teníais  en común pero, sin embargo, te recomendamos que evites recaer. Piensa que vas por el buen camino. Aguanta o volverás pasos atrás.
4. Depresión. ¡Cuidado con la penúltima fase! Es el momento en el que se es consciente de que no hay vuelta atrás y que lo que ha ocurrido es real. Invade una profunda tristeza, hay una alteración del sueño y del apetito (o no duermes/comes nada o quieres no parar de dormir/comer para evadir la realidad). Apenas tienes ganas de salir de casa y te aíslas.
5. Aceptación. Última fase. Aceptas que terminaste con tu pareja y vas recuperando tus ganas sin que te invadan tantos pensamientos negativos. Los recuerdos y  el saber de esa persona ya no te causan el mismo sufrimiento que al principio y empiezas a poder hablar de tu relación pasada con más normalidad , focalizando tu energía en (re)construirte.

Hay que tener en cuenta que las fases no comienzan para las dos personas al mismo tiempo y que, normalmente, la persona que rompe la relación ya ha pasado por algunas de ellas para tomar la decisión, mientras que la persona que es dejada probablemente se encuentre partiendo de cero. A su vez, debemos recalcar que cada persona tiene su propio ritmo de superación y de rehacer su vida. No te compares con nadie, vive tu propio proceso personal.

Es necesario haber amado, después perder el amor y luego volver a amar todavía. – Vincent Van Gogh

A continuación dejamos unos consejos que esperamos que puedan ayudarte a superar tu ruptura de pareja y (re)construirte para ser tu mejor versión:

• Acepta el cambio. Cambia el chip. La mentalidad con la que afrontar cualquier cambio en tu vida es vital para llevarlo a cabo.
• Trabaja la autoestima. No necesitas a nadie para ser feliz. Estate tú, contigo.
• No te victimices. Es uno de los errores más frecuentes que se cometen. Compadecerse es cavar tu propia tumba. No obstante, es cierto que
  debes permitirte llorar cuando lo necesites, pero ten presente que hay que sacar fuerzas para salir de todo lo que estas pasando, como otras muchas personas lo han hecho.
• Sal, busca apoyo social y conoce gente nueva. Crearas nuevos recuerdos, espacios para nuevas posibilidades y planes. Encerrarse no sirve para nada. Nutrirse de buenas vibraciones de las personas que tienes a tu alrededor es muy beneficioso en estas situaciones, respirar oxigeno nuevo.
• No pares de hacer cosas, mantén tu mente ocupada. Haz todos aquellos planes que has pospuesto, sal de tu zona de confort, busca nuevos hobbies… Crea nuevos hábitos.
• Evita el contacto con tu ex. 
• Busca el lado positivo.
• Pide ayuda. La ayuda psicológica esta a tu disposición durante todo el proceso y si notas que no avanzas o que no te sientes bien, no lo dudes y acude a terapia.