En muchas ocasiones tendemos a reprimir nuestras emociones de manera inconsciente, ya que algo nos molesta o nos incomoda y tendemos a evitarlo. Cuando ponemos en práctica esta técnica es porque no sabemos que estas emociones están presentes. Si las evitamos, se quedan dentro y, en cuanto surja la oportunidad, lucharán por salir y sufriremos las consecuencias.
Si esto ocurre, nuestro cuerpo seguirá experimentando la emoción, pudiendo llegar a provocar alteraciones físicas: ansiedad o estrés, altos niveles de adrenalina y cortisol, tasa cardíaca elevada, etc.
Las personas que reprimen emociones pueden llegar a este punto por experiencias pasadas, por ejemplo, que en su infancia vivieran en un entorno donde se les dio poco o ningún espacio para experimentar o expresarse emocionalmente.
Hay dos razones fundamentales que puedan llevar a las personas a reaccionar de esta forma:
- Actitud familiar: aquellas personas que se hayan criado en entornos donde no estaba bien visto expresar sus emociones o se señalaba esto como algo negativo, tienen muchas posibilidades de que, al crecer, las repriman.
- Experiencias traumáticas en la infancia: es posible que, si una persona fue humillada, criticada o castigada por mostrar sus sentimientos, tenga más posibilidades de evitar exteriorizar sus emociones en su edad adulta.
Expresiones como: no tienes que estar triste, no es para tanto, eres cobarde, etc., son mensajes que se reciben en el día a día que, aunque la persona que los verbalice lo hace con la mejor intención, puede afectar a que quienes los reciben, se los queden en su subconsciente y, por tanto, repriman sus emociones.
Contenidos
¿Cómo saber si tiendes a reprimir emociones?
Las emociones reprimidas hacen daño a quienes las ocultan y, además, existen indicadores de que estas no se están gestionando adecuadamente, como pueden ser:
- Negatividad emocional: quienes no muestran sus emociones pueden creer que exteriorizarlas es un signo de debilidad y que, por tanto, es mejor no expresarlas.
- Conductas de escape: muchas de las personas que no expresan sus sentimientos pueden recurrir a conductas de escape como comer en exceso, alcoholismo o enfocarse mucho en el trabajo.
- Quienes reprimen sus emociones suelen tener estrés y nervios la mayor parte del tiempo.
- Otro de los rasgos de este tipo de personas es que suelen olvidarse de algunos datos o tareas pendientes.
- Aparición de insomnio o problemas para conciliar el sueño.
Debemos aprender a lidiar con las emociones negativas. Cuando estas no se están gestionando de forma sana es bueno buscar ayuda para aprender a llevarlas de la mejor manera posible. Aunque, en el proceso, muchas de las emociones que aparecerán serán difíciles de digerir, poco a poco, se van aceptando y asimilando.
Beneficios de trabajar las emociones
Cuando se trabajan las emociones, los aprendizajes que se obtienen son innumerables, además de que aprendemos a conocernos mejor. Algunos de los aprendizajes que se consiguen cuando se hace un trabajo personal de estas características, son:
- Entender cómo nos relacionamos con nuestras emociones: aprender a identificar cómo vas a reaccionar cuando sientas según qué emoción.
- Identificar qué situaciones te van a desencadenar ciertas emociones.
- Comprender qué significan las emociones negativas y positivas.
- Acudir a terapia: es importante que si sientes que no eres capaz de gestionar tus emociones o crees que te cuesta mucho hacerlas salir, recurras a profesionales para conocerte mejor, aprender a gestionar tus emociones y que estas no te bloqueen.
Cuando sientas que tus emociones te sobrepasan, que no puedes gestionarlas, que estás cambiando tu forma de ser o sientes mucho malestar, no dudes en acudir a terapia. Aunque es un proceso lento, y en el que se tiene que trabajar intensamente en la introspección, los beneficios son innumerables. Además, trabajarás en un espacio seguro, en el que te conocerás a muchos niveles y en el que aprenderás a gestionar tus emociones de forma sana y equilibrada.
Otras entradas de interés del Instituto de Hipnosis y Psicología
Fuentes. Bibliografía y webgrafía
https://www.psicoemocionat.com/reprimir-emociones-no-es-la-solucion/
https://psicoterapiaserendipia.com/emociones-reprimidas/
https://lamenteesmaravillosa.com/reprimir-las-emociones-te-puede-enfermar/