Mitos y miedos sobre la hipnosis: desmintiendo falsas creencias

A lo largo de los años, los mitos sobre la hipnosis ha estado rodeada de mitos y falsas creencias que han generado miedo y escepticismo en muchas personas. La imagen que el cine y la televisión han transmitido de esta práctica suele estar alejada de la realidad, presentándola como un método de control mental o una herramienta para manipular a las personas. Sin embargo, la hipnosis clínica es una técnica terapéutica seria y respaldada por la ciencia, utilizada para tratar diversos problemas como la ansiedad, el estrés, los trastornos del sueño e incluso las adicciones.

En este artículo, analizaremos los mitos más comunes sobre la hipnosis, explicaremos su verdadero funcionamiento y desmentiremos los miedos infundados que rodean esta práctica. Si alguna vez has tenido dudas o temores sobre la hipnosis, aquí encontrarás respuestas basadas en la evidencia científica y el conocimiento profesional.

¿Por qué existen tantos mitos sobre la hipnosis?

El desconocimiento y la desinformación han hecho que la hipnosis clínica sea vista con escepticismo por muchas personas. Aunque se trata de una técnica con aplicaciones científicas y médicas, la imagen que se ha popularizado en la cultura general está más relacionada con el entretenimiento que con la realidad. A continuación, exploramos algunas de las principales razones por las que existen tantos mitos en torno a la hipnosis.

Influencia del cine y la televisión en la percepción de la hipnosis

Desde películas hasta programas de televisión han creado mitos sobre la hipnosis, la hipnosis ha sido representada de formas que poco tienen que ver con su uso real. En el cine, es común ver a personajes hipnotizados que entran en un estado de trance profundo en el que pierden la voluntad y obedecen órdenes sin cuestionarlas. En la realidad, la hipnosis no funciona de esta manera creando miedo a la hipnosis.

Las representaciones ficticias suelen exagerar y distorsionar lo que realmente ocurre en un proceso hipnótico. Por ejemplo, las escenas en las que un hipnotizador usa un péndulo y dice “duerme” para que la persona caiga inconsciente son pura fantasía. La hipnosis es un estado de concentración profunda, no un estado de inconsciencia o pérdida de control.

Desinformación y falta de evidencia en la cultura popular

Otro motivo por el que persisten los mitos sobre la hipnosis clínica es la falta de información científica accesible al público general. Muchas personas no tienen acceso a estudios o investigaciones que demuestran la efectividad de la hipnosis en el ámbito clínico.

Además, algunas prácticas no reguladas han contribuido a generar más confusión. Existen personas que, sin formación profesional, ofrecen servicios de hipnosis sin seguir principios científicos, lo que puede generar desconfianza en la técnica. Es fundamental que quienes buscan utilizar la hipnosis clínica con fines terapéuticos acudan a profesionales certificados en psicología o medicina y así no tener miedo a la hipnosis.

Mito 1: «La hipnosis es una forma de control mental»

Uno de los mitos más extendidos sobre la hipnosis es la creencia de que una persona hipnotizada pierde el control y queda completamente a merced del hipnotizador. Esta idea ha sido alimentada por películas, programas de televisión y espectáculos de entretenimiento en los que se muestra a personas realizando acciones involuntarias bajo hipnosis.

Sin embargo, la realidad es muy diferente. La hipnosis clínica no tiene nada que ver con el control mental, sino que es un estado de relajación profunda y concentración en el que el paciente sigue siendo consciente de lo que sucede a su alrededor.

Lo que realmente ocurre en un estado hipnótico

Cuando una persona está en un estado hipnótico, su mente no está “dormida” ni bajo el dominio de otra persona. En lugar de eso, entra en un estado de hiperfocalización, en el que es más receptiva a sugerencias positivas, pero sin perder el control de sus decisiones.

Los estudios neurocientíficos han demostrado que la actividad cerebral durante la hipnosis se asemeja a la que ocurre cuando alguien está completamente concentrado en una tarea o en un estado de meditación profunda. La persona hipnotizada no está inconsciente ni obligada a seguir órdenes en contra de su voluntad.

La persona bajo hipnosis mantiene el control en todo momento

Un hecho clave que desmiente este mito es que nadie puede ser hipnotizado en contra de su voluntad. Para que la hipnosis funcione, la persona debe estar dispuesta a participar y seguir las indicaciones del hipnoterapeuta.

Además, si en algún momento el paciente desea salir del estado hipnótico, puede hacerlo con facilidad. No existe ningún «poder» del hipnotizador para obligar a alguien a actuar en contra de sus principios o valores.

Mito 2: «Me pueden obligar a hacer cosas en contra de mi voluntad»

Este mito está estrechamente relacionado con el anterior y es una de las principales preocupaciones de quienes no conocen cómo funciona realmente la hipnosis. En muchas ocasiones, se cree que una persona hipnotizada puede ser manipulada para hacer cosas que no haría en su estado consciente, pero esto es completamente falso.

Diferencias entre hipnosis clínica e hipnosis de espectáculo

Es importante diferenciar la hipnosis clínica, utilizada en entornos terapéuticos para mejorar la salud mental y emocional, de la hipnosis de espectáculo, que tiene como único objetivo entretener.

En los espectáculos de hipnosis, los participantes han sido previamente seleccionados porque son más sugestionables y han aceptado voluntariamente participar en el show. En cambio, en la hipnosis clínica, el terapeuta guía al paciente en un estado de relajación profunda, sin que en ningún momento pierda la capacidad de decidir por sí mismo.

La ética profesional en la hipnosis terapéutica

Los profesionales que practican la hipnosis clínica siguen un código ético estricto, basado en la confianza y el bienestar del paciente. El objetivo de la hipnosis no es manipular, sino ayudar a las personas a superar problemas emocionales, fobias, estrés o adicciones.

Los organismos médicos y psicológicos que avalan la hipnosis, como la American Psychological Association (APA), dejan claro que nadie puede ser obligado a actuar en contra de su moral o valores bajo hipnosis.

Mito 3: «Solo las personas débiles pueden ser hipnotizadas»

Existe la creencia errónea de que solo las personas con poca fuerza de voluntad o «mentes débiles» pueden ser hipnotizadas. Esta idea proviene del desconocimiento sobre cómo funciona realmente la hipnosis y de la percepción de que alguien hipnotizado pierde el control sobre sí mismo.

La realidad es completamente diferente: la hipnosis no tiene nada que ver con la debilidad mental, sino con la capacidad de concentración y apertura a la experiencia.

La hipnosis depende de la concentración y no de la debilidad mental

Para entrar en un estado hipnótico, es necesario que la persona esté dispuesta y tenga la capacidad de concentrarse profundamente. De hecho, los estudios muestran que las personas con mayor inteligencia emocional y habilidades de concentración son más propensas a beneficiarse de la hipnosis.

Lejos de ser una cuestión de debilidad, la hipnosis requiere colaboración activa. La persona debe permitir que su mente se relaje y seguir las indicaciones del terapeuta. Por lo tanto, quienes poseen una mente más analítica y con mayor autocontrol pueden incluso experimentar una respuesta más efectiva a la hipnosis.

Estudios científicos que respaldan la hipnosis clínica como una herramienta terapéutica

Diversas investigaciones han demostrado que la hipnosis es un estado natural de la mente y que cualquier persona con la capacidad de relajarse y concentrarse puede entrar en este estado. Un estudio publicado en la Revista de la Sociedad Internacional de Hipnosis Clínica indica que aproximadamente el 85% de la población puede experimentar algún grado de hipnosis.

Además, instituciones como la American Psychological Association (APA) y la British Society of Clinical Hypnosis (BSCH) reconocen la hipnosis como una técnica psicológica válida con aplicaciones en el tratamiento de la ansiedad, el dolor crónico, las fobias y otros trastornos.

Por lo tanto, ser hipnotizable no es signo de debilidad, sino de una mente abierta, concentrada y receptiva.

Mito 4: «No recordaré nada después de la sesión»

Otro de los temores más comunes es la idea de que, al finalizar una sesión de hipnosis, la persona no recordará nada de lo que ha ocurrido. Este mito ha sido reforzado por el cine y la televisión, donde se muestra a los personajes despertando de la hipnosis sin ningún recuerdo de lo sucedido.

En realidad, la mayoría de las personas recuerdan perfectamente lo que ocurre durante la sesión de hipnosis.

Diferencia entre hipnosis y amnesia inducida en el entretenimiento

En los espectáculos de hipnosis, a veces se utiliza la técnica de la sugestión posthipnótica, que puede hacer que una persona olvide ciertas partes del show. Sin embargo, en la hipnosis clínica, este tipo de sugestión no se emplea, ya que el objetivo es que el paciente recuerde la experiencia para aplicar los cambios positivos en su vida.

A menos que la persona entre en un estado de relajación tan profundo que se quede dormida, recordará todo lo que ha ocurrido durante la sesión. Incluso si se duerme, el subconsciente sigue recibiendo las sugestiones terapéuticas, por lo que el efecto de la hipnosis sigue presente.

La mayoría de las personas recuerdan todo lo que ocurre en la sesión

Los estudios demuestran que el estado hipnótico es similar a un estado de relajación profunda, donde la mente está enfocada y receptiva, pero en ningún momento pierde la capacidad de recordar lo que sucede.

Es importante aclarar que la hipnosis no es lo mismo que un estado de inconsciencia. Durante la sesión, el paciente puede escuchar, hablar e incluso abrir los ojos si así lo desea. La memoria no se ve afectada, y la persona recuerda la sesión con total claridad.

Mito 5: «La hipnosis no tiene base científica»

Uno de los mitos más extendidos es que la hipnosis no está respaldada por la ciencia y que es una práctica sin fundamentos médicos o psicológicos. Sin embargo, esta afirmación es completamente falsa. La hipnosis ha sido objeto de numerosas investigaciones científicas que han demostrado su eficacia en el tratamiento de diversos trastornos físicos y psicológicos.

La hipnosis clínica es una herramienta utilizada en psicología y medicina, avalada por importantes organismos internacionales como la American Psychological Association (APA), la British Society of Clinical Hypnosis (BSCH) y la Mayo Clinic.

Aval de instituciones médicas y psicológicas sobre la hipnosis

Organismos médicos y psicológicos han reconocido la hipnosis como una técnica válida para tratar distintos problemas de salud. Algunos de sus usos más frecuentes incluyen:

• Tratamiento de la ansiedad y el estrés.
• Manejo del dolor crónico y agudo.
• Apoyo en el tratamiento de fobias y traumas.
• Mejoras en la calidad del sueño.
• Dejar de fumar y reducir otros hábitos perjudiciales.

Un estudio publicado en la revista International Journal of Clinical and Experimental Hypnosis concluyó que la hipnosis puede mejorar la efectividad de los tratamientos psicológicos tradicionales, aumentando la capacidad de los pacientes para cambiar pensamientos y comportamientos negativos.

Aplicaciones de la hipnosis clínica en la medicina y la psicología

En el campo de la medicina, la hipnosis se utiliza en procedimientos quirúrgicos como la hipnoanestesia, donde se reduce o incluso se elimina la necesidad de anestesia química. También ha demostrado ser efectiva en el tratamiento del síndrome del intestino irritable (SII), según estudios realizados por la British Medical Journal.

En psicología, la hipnosis se emplea como una herramienta complementaria en terapias para tratar la ansiedad, la depresión y las fobias. Los avances en neurociencia han permitido comprobar que la hipnosis provoca cambios en la actividad cerebral, lo que refuerza su eficacia como tratamiento terapéutico.

Por lo tanto, lejos de ser una práctica sin respaldo, la hipnosis es una técnica con base científica y aplicaciones reales en la salud mental y física y no debe de haber mitos sobre la hipnosis.

¿Por qué algunas personas tienen miedo a la hipnosis clínica y mitos sobre la hipnosis?

A pesar de la evidencia científica, muchas personas siguen sintiendo temor ante la idea de ser hipnotizadas. Este miedo suele estar basado en la falta de información y en creencias erróneas sobre lo que implica estar en un estado hipnótico.

Experiencias previas y creencias limitantes

Algunas personas han escuchado relatos negativos sobre la hipnosis, ya sea por experiencias mal dirigidas o por haber sido influenciadas por la cultura popular. El desconocimiento sobre el proceso hipnótico hace que se perciba como algo peligroso o incontrolable.

Entre los miedos más comunes se encuentran:

• Perder la conciencia durante la sesión.
• No recordar lo que ha sucedido.
• Revelar secretos involuntariamente.
• No poder «despertar» del estado hipnótico.

Sin embargo, todos estos temores carecen de fundamento. La hipnosis es un estado completamente natural que cualquier persona experimenta de forma cotidiana, por ejemplo, cuando se sumerge en la lectura de un libro o se concentra profundamente en una tarea.

Cómo superar el miedo a la hipnosis clínica y aprovechar sus beneficios

Para superar los miedos infundados sobre la hipnosis, es recomendable:

1. Informarse a través de fuentes fiables. Leer estudios y consultar a profesionales acreditados ayuda a comprender que la hipnosis es una técnica segura.
2. Elegir un hipnoterapeuta cualificado. Asegurarse de que el profesional tenga formación en psicología o medicina garantiza un proceso serio y efectivo.
3. Comprender que la hipnosis es una herramienta de autoconocimiento. En lugar de ver la hipnosis como algo externo o mágico, se debe entender como un método para acceder a los recursos internos del propio cerebro.

Cuando una persona entiende que la hipnosis es un proceso colaborativo y que siempre mantiene el control, los miedos desaparecen y se puede aprovechar al máximo sus beneficios terapéuticos.

La hipnosis clínica es una técnica segura y efectiva

A pesar de los mitos y miedos que rodean a la hipnosis, la evidencia científica y la experiencia de profesionales de la salud confirman que la hipnosis clínica es una técnica segura y efectiva cuando se aplica correctamente. Su uso en el ámbito terapéutico ha demostrado beneficios en el tratamiento de la ansiedad, el estrés, el dolor crónico, los trastornos del sueño y muchas otras condiciones.

Beneficios probados en ansiedad, estrés y adicciones

La hipnosis clínica es utilizada como una herramienta complementaria en terapias psicológicas y médicas debido a sus múltiples beneficios:

• Reducción del estrés y la ansiedad. La hipnosis ayuda a calmar la mente, promoviendo un estado de relajación profunda que permite reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
• Mejora de los trastornos del sueño. Se ha comprobado que la hipnosis facilita la conciliación del sueño y mejora su calidad, especialmente en personas con insomnio.
• Tratamiento del dolor crónico. La hipnosis ha sido utilizada como un método analgésico natural en pacientes con fibromialgia, artritis y migrañas crónicas.
• Apoyo en la superación de adicciones. En el caso del tabaquismo y otras dependencias, la hipnosis puede reforzar la motivación y modificar los patrones de pensamiento asociados al hábito.

Según la Asociación Americana de Psicología (APA), la hipnosis es una técnica con aplicaciones terapéuticas bien documentadas, especialmente en el manejo del dolor y el control del estrés.

El papel del profesional en el proceso de hipnosis clínica terapéutica

Para que la hipnosis sea efectiva, es fundamental que sea guiada por un profesional cualificado en psicología o medicina. Un hipnoterapeuta capacitado:

• Evalúa la situación del paciente y su historial clínico antes de aplicar la hipnosis.
• Diseña una sesión personalizada según las necesidades individuales.
• Asegura un entorno seguro y controlado, sin riesgos para el paciente.

Es importante diferenciar la hipnosis clínica, utilizada en entornos terapéuticos, de la hipnosis de entretenimiento, que se basa en la sugestión y el espectáculo. Un profesional de la salud siempre priorizará el bienestar del paciente y trabajará dentro de un marco ético y científico.

Derribando los mitos y confiando en la hipnosis clínica

A lo largo de este artículo hemos desmontado los principales mitos que rodean a la hipnosis y hemos explicado con base científica cómo funciona realmente. La hipnosis no es magia, ni manipulación mental, ni un estado de inconsciencia. Es una técnica terapéutica seria, respaldada por la ciencia y aplicada por profesionales de la salud.

Resumen de los puntos clave:

✅ La hipnosis clínica NO es control mental ni manipulación. La persona mantiene el control en todo momento.
✅ NO se puede obligar a nadie a hacer algo en contra de su voluntad.
✅ La hipnosis es un proceso natural basado en la concentración y la relajación.
✅ Es una técnica segura y eficaz en el tratamiento de ansiedad, estrés, adicciones y dolor.
✅ Está respaldada por la American Psychological Association (APA) y otras instituciones científicas.

Si alguna vez has tenido dudas sobre la hipnosis clínica, esperamos que este artículo haya servido para aclararlas. La hipnosis clínica es una poderosa herramienta para el bienestar emocional y mental, cuando se aplica de forma ética y profesional.

¡Es tu turno!

Si te interesa conocer más sobre cómo la hipnosis puede ayudarte, consulta con un profesional certificado y descubre sus beneficios en primera persona.

Luisa Fernanda Martínez Jurado

Psicóloga Sanitaria  AN 07638

Cofundadora del Instituto De Hipnosis y Psicología (IHP)

Laura Gómez Garrido

Psicóloga Sanitaria  AN 06302

Cofundadora del Instituto De Hipnosis y Psicología (IHP)