El estrés y el multitasking son conceptos estrechamente relacionados que, en la entrada del blog de hoy, os vamos a definir además de ver sus posibles causas y cómo pueden afectar a nuestro cerebro.
Para hablar del estrés y el multitasking debemos hablar de la persona perfeccionista y autoexigente que se esconde detrás de quien padece estas patologías.
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El perfeccionismo y la autoexigencia.
Existe una convicción en el ser humano social de que se debe vivir en la perfección para llegar a la plenitud vital que concibe la sociedad. Por ello, se vive en una constante búsqueda de lo ideal o perfecto.
La autoexigencia puede ser un inductor de la consecución de logros personales, sin embargo el problema surge cuando el individuo desarrolla un sentimiento de fracaso por no alcanzar la perfección. Esto desarrolla un perfeccionismo patológico en la mente y con él, un nivel de tensión y ansiedad en cualquier tarea a realizar.
Al final, el perfeccionismo patológico produce un gran daño cognitivo, ya que puede manifestarse como una procrastinación porque para hacer una tarea debe emplearse mucho esfuerzo y tener un acabado perfecto o, por el contrario, no serviría de nada. A su vez, puede demorar en una baja productividad porque se pierde el tiempo en demasiada organización, revisiones, cambios y lamentos por el resultado. En lineas generales, el perfeccionismo y la autoexigencia pueden provocar depresión, estrés, ansiedad y rechazo del entorno.
El estrés.
Normalmente definimos el estrés como una sensación de agobio, agotamiento o preocupación. No obstante, el estrés es un sentimiento de tensión físico o emocional derivado de cualquier situación o estimulo en el que el sujeto sienta presión.
Se considera un estado de defensa propio que nos ayuda a reaccionar y adaptarnos a diferentes acontecimientos. Si el nivel de estrés es desmesurado o frecuente se considera un problema para la mente , por el desgaste que genera, la irritabilidad o ansiedad.
Existen dos tipos principales de estrés:
- El estrés agudo es el que entendemos como estrés positivo, a corto plazo y que desaparece rápidamente. Todas las personas sienten estrés agudo en algún momento de su vida, como por ejemplo al frenar bruscamente un vehículo, esquiar o discutir con alguien.
- El estrés crónico dura un periodo de tiempo prolongado y, aunque no necesariamente es un estrés negativo, pero sí que puede llegar a generar un mayor malestar en nosotros. Algunos ejemplos de estrés crónico son los problemas de dinero o un matrimonio infeliz.
En relación a esto, es importante saber que cualquier tipo de estrés que perdure por semanas o meses puede desencadenar en problemas de salud al acostumbrase el individuo a su presencia sin saber controlarlo o gestionarlo.
El multitasking .
El multitasking es la capacidad humana de llevar a cabo varias funciones y tareas de manera simultánea. Para tener éxito en esta habilidad, y que aquello que hagamos se realice correctamente, es preciso el enfoque total de nuestra atención pero, sin embargo, cuando se está haciendo Multitasking esto no sucede, porque se extiende el foco a varias tareas.
Tal y cómo hemos mencionado, el perfeccionismo y el estrés están estrechamente ligados por la autopresión que ejerce sobre aquellas personas que lo sufren. El multitasking, en muchas ocasiones, no es mas que un síntoma o consecuencia de este tipo de patologías, desencadenando en las siguientes consecuencias psicológicas:
- Efectos en la eficiencia y el rendimiento. Cuando se abarcan muchas cosas, la atención se dispersa y no se acaban las tareas con éxito.
- Reduce el coeficiente intelectual. Al ralentizar a la persona, tiene consecuencias similares a las de consumir marihuana.
- Daño cerebral. Puede disminuir la inteligencia emocional.
- Problemas de memoria a corto y largo plazo.
- Menor capacidad de concentración.
- Perjudica los resultados. Al bajar la eficacia y el rendimiento los resultados son peores, repercutiendo en el autoestima.
- Daña las relaciones y aumenta del estrés crónico.
- Riesgos de padecer depresión y ansiedad social.
¡Cuidado con la culpabilidad por no acabar las tareas o no cumplir con los estándares marcados! El sentimiento de culpa se asocia al autocastigo, y la depresión es un estado que se puede vincular esto. A veces la depresión tiene relación con el sufrimiento en sí mismo. No disfrutar, no reír, puede volverse un imperativo, un castigo que la persona se impone frente a la culpa.+
¿Y ahora qué?
Para gestionar el estrés, la autoexigencia, el perfeccionismo y el hábito de hacer multitasking te dejamos 4 consejos generales para aprender a manejar estos sentimientos:
- Práctica la autocompasión
- Escúchate y presta atención a tu diálogo interior.
- Realiza autoanálisis y toma de conciencia.
- Observa cuáles son tus emociones.
En el Instituto de Hipnosis y Psicología estamos para ayudarte.
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